Más de 4.000 personas acudieron al funeral de Mahmud Juda, de 30 años, un alto responsable de las Brigadas Al Qods, la rama armada militar de la Yihad, entre la ciudad de Gaza y el campo de refugiados de Jabaliya, más al norte, donde será inhumado.
Mahmud Juda murió cerca de Gaza cuando un helicóptero de combate israelí lanzó tres misiles contra el vehículo en el que se encontraba en compañía de otro miembro de la Yihad, Amine al Dahdouh, de 42 años, y de un primo de éste, Aymane, de 20 años, que murieron.
«El muro no nos impedirá realizar más ataques», atacó por un altavoz un militante de la Yihad que se dirigía a un grupo que caminaba detrás de los féretros.
Los blancos mortales de activistas no conseguirán acabar con la Yihad Islámica, declaró otro militante en unas declaraciones dirigidas al ministro israelí de Defensa, Saul Mofaz.
Fte E.Press