«Estos intercambios no podrán hacerse si no contamos con un socio palestino y si no se acaba con el terrorismo», prosiguió Gissin, para quien de lo que se trata es de «permitir que dos Estados, Israel y el Estado palestino, coexistan pacíficamente codo con codo», añadió Gissin.
«Los palestinos que esperen vencer a Israel con la bomba demográfica se oponen evidentemente a esta idea», añadió. Gissin se refería a la importante tasa de crecimiento demográfico que se registra entre los árabes israelíes (1,1 millón de habitantes entre una población global de 6,7 millones), que podría convertir a la población judía en minoritaria.
Por su parte, Sharon declaró al diario ‘Maariv’ que «no se trata de transferir personas de un lugar a otro, sino de una situación en la cual la gente seguiría en sus casas con sus bienes y sus tierras pero bajo otra soberanía». «Hay que estudiar las condiciones jurídicas que lo permitan en el marco de un futuro acuerdo permanente», añadió.
En las mismas declaraciones, el primer ministro también defendió su plan de evacuación de las colonias judías de la franja de Gasza, que calificó de «crucial para la supervivencia de Israel».
«Voy a mirar a los colonos a los ojos. No va a ser fácil, va a ser duro. Es complejo», ya que «afecta a miles de personas, pero sé que este plan es crucial para la supervivencia del país y del pueblo. Es mi responsabilidad», afirmó.
Fte E.Press