El gobierno israelí reaccionó antes de la publicación del informe, afirmando que es una prueba de que el antisemitismo se esconde tras la crítica política a Israel.
«La Unión Europea, que ha demostado sensibilidad hacia los temas de derechos humanos, podría hacer algo para poner fin al rampante lavado de cerebro y la demonización de Israel, antes de que Europa regrese a los lugares más oscuros de su pasado», dijo el ministro de Asuntos de la Diáspora Nathan Sharansky.
El centro Simon Weisenthal, una organización judía de derechos humanos, dijo que la encuesta prueba que hay una presencia profunda del antisemitismo en la sociedad europea, y recomendó que la Unión Europea sea excluida de las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos.
La Unión Europea, que ha demostado sensibilidad hacia los temas de derechos humanos, podría hacer algo para poner fin al rampante lavado de cerebro y la demonización de Israel, antes de que Europa regrese a los lugares más oscuros de su pasado.
Nathan Sharansky, ministro de la Asuntos de la Diáspora de Israel.
El portavoz de la Comisión Europea, Gerassimos Thomas, dijo que «la reacción de Israel es muy legítima, pero no es nuestra tarea interpretar cada uno de nuestros estudios».
El estudio se basa en entrevistas a 7.555 personas en el continente europeo.
El 53% de los encuestados también respondió que considera a Irán, Corea del Norte y Estados Unidos como una amenaza para la paz mundial.
Los siguen en su orden Afganistán, Pakistán, Siria, Libia y Arabia Saudita.