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Activistas del “Mavi Marmara” trataron de secuestrar a tres soldados que quedaron inconscientes como consecuencia de los golpes recibidos durante la redada que llevó a la captura de la nave insignia de la flotilla que pretendió quebrar el bloqueo a Gaza, según los primeros resultados de una investigación de la Marina de la que informó el diario israelí Haaretz.
Los tres efectivos fueron arrastrados a una de las salas de pasajeros debajo de la cubierta y fueron allí retenidos por varios minutos, hasta que recuperaron la conciencia después de que los otros soldados comenzaron a tomar el control de la nave y lograron sumarse a sus compañeros.
La Armada rechaza las críticas por haber estado mal preparada: "Ellos eran terroristas, sicarios que vinieron a asesinar soldados, no a ayudar a los residentes de la Franja de Gaza", dijo un oficial.
Los soldados informaron que los activistas les habían disparado y que al menos dos marinos sufrieron heridas de bala. Tras el incidente fueron encontrados casquillos de balas 9 mm, un tipo de proyectil que no utilizan los militares.
El capitán del buque le dijo al jefe del operativo que se arrojaron armas al mar antes de que el buque fuese totalmente controlado.
"Ningún pacifista verdadero resultó herido y ningún soldado murió, a pesar de que estuvieron muy cerca, y finalmente, los barcos están atracados en Ashdod. Fue muy complicado, pero el resultado fue casi perfecto", evaluó un alto oficial de la Marina