“La armada de odio y violencia en apoyo de la organización terrorista Hamas fue una provocación premeditada y sin sentido. Los organizadores son conocidos por su relación con la Jihad global, Al Qaeda y Hamas. Tienen un historial de contrabando de armas y terror asesino. A bordo del barco encontramos armas que habían sido alistadas por adelantado y que fueron utilizadas contra nuestras fuerzas. La intención de los organizadores fue violenta, su método fue violento y lamentablemente, los resultados fueron violentos”.
En la conferencia de prensa, Ayalon también indicó que “Israel lamenta toda pérdida de vidas e hizo todo lo posible por evitar este resultado. Reiteradamente, pedimos a los organizadores y a todos sus asociados, mediante la diplomacia y otros medios, que terminaran con la provocación”.
Asimismo, apuntó que la denominada ayuda humanitaria no tenía propósitos humanitarios. El viceministro explicó que de haber sido el caso, “deberían haber aceptado nuestra propuesta de enviar todo producto humanitario mediante los canales adecuados que utilizamos a diario, porque nos aseguramos que Gaza no esté falta de suministros humanitarios”. Israel, en lo cotidiano, se ocupa de eso.
“Les pedimos que enviaran el cargamento mediante canales adecuados como lo son la ONU, la Cruz Roja o nosotros, pero no tuvimos respuesta”.
Ayalon agregó que en realidad, lo que denominaron como campaña humanitaria sólo reiteraba que su intención y objetivo era romper el bloqueo, el bloqueo marítimo, en Gaza.
Ese bloqueo es legal y justificado por el terror que Hamas aplica en ese lugar. El hecho de permitir el ingreso de esos barcos a Gaza habría abierto un pasillo de contrabando de armas y de terroristas a Gaza, con los inevitables resultados de miles de muertes civiles en la región, explicó.
“Tras los pedidos reiterados hacia los organizadores, les dijimos que no podrían romper el bloqueo, dado que según el derecho marítimo tenemos el derecho de hacerlo. Desafortunadamente, también, los organizadores en el barco, no hicieron eco de los llamados pacíficos de nuestras fuerzas por seguirlos y terminar con esta operación.
Para concluir, aseguró que “ningún país soberano toleraría semejante violencia contra su población civil, su soberanía y el derecho internacional. En Israel, hoy llamamos a todas las partes relevantes y países relevantes a que trabajen juntos para calmar la situación”.
GL