El lingüista norteamericano Noam Chomsky decidió no intentar cruzar la frontera por el puente de Allenby. En su lugar, realizará una videoconferencia en la Universidad de Birzeit, cerca de Jerusalem.
A pesar de los informes en los medios israelíes que aseguraban que Israel le permitiría el cruce a Chomsky, el lingüista percibió que no había garantía de que eso suceda. Y además, les expresó a los organizadores de la conferencia que sintió que las autoridades israelíes dificultaron las tratativas.
Chomsky se reunió ayer con el primer ministro palestino, Salam Fayyad y según un comunicado en el encuentro “discutieron la situación política y los acontecimientos en Palestina”.
Fayyad afirmó que "condena, firmemente, la decisión de las fuerzas de israelíes de impedir la entrada de Chomsky".
Según cita el diario israelí Haaretz, el portavoz del primer ministro Benjamín Netanyahu, Mark Regev, dijo ayer que la idea de que Israel impida la entrada de las personas importantes es "ridícula" y que eso "no está sucediendo".
El domingo pasado, Chomsky informó al grupo Right to Enter (Derecho a Entrar) por vía telefónica de que los agentes de la frontera israelí estamparon el sello "entrada denegada" en su pasaporte cuando intentó cruzar la frontera desde Jordania.
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