En primer lugar, “Mendele” Junowicz explicó los motivos por los cuales al culminar su segundo mandato como presidente de la OSA, en julio 2006, no aceptó ser postulado a la reelección y también como fue designado presidente honorario de la OSA.
El dirigente indicó que “el Estatuto de la OSA prevé solamente que puede haber una renovación por un período, cada período dura 2 años y puede haber una y puede haber una renovación por otros 2 años, nada más, y los Estatutos están para ser cumplidos”.
“Yo no me imaginaba que se iba a proponer designarme presidente honorario. Había un gran afecto por parte de los javerim (compañeros) y, de repente, en la mitad de la Asamblea, Fito Goldsman propuso que en base a la gestión realizada Manuel Junowicz sea designado presidente honorario de la OSA, y todos los presentes empezaron a aplaudir”, comentó.
Junowicz confesó que ante ese momento histórico se sonrojó. “Agradecí pues era un caso inédito y tengo una deuda de gratitud para aquellos que me acompañaron en la gestión”, afirmó.
“Nuestra comunidad, a veces, pone en cabeza de su presidente lo que hacen -en nuestra gestión por lo menos- decenas de dirigentes que no son nombrados como corresponde pero que trabajan coco a codo e igual que las máximas autoridades de la institución trayendo los distintos proyectos y desarrollándolos”, dijo.
Sobre las razones por las que decidió volver a ser candidato de la organización sionista, Junowicz explicó que “el detonante fue, que sobre fin del año pasado, se comenzó a hablar entre la dirigencia que había graves problemas para la viabilidad y continuidad de la OSA atento a dificultados económicas”.
“Eso generó en mí una gran movilización. La presidencia honoraria puede ser tomada como que no tenés que inmiscuirse, es un honor pero crea una responsabilidad y sos referente”, expresó.
A lo que agregó: “Escuchar que una institución está analizando su viabilidad y que puede ser que no continúe, a mí me generó un gran dolor, y no sólo a mí sino a mucha gente con la cual hablamos y dijimos ‘esto no va bien’. Realmente nos generó una movilización y a partir de ahí se dieron otras circunstancias”.
Consultado sobre los motivos que lo llevaban a postularse como candidato de Avodá de Argentina para presidir la OSA, Junowicz, respondió que en ese momento no hablaría y que recién lo haría luego de la elección interna. A continuación su explicación por esa actitud.
“Voy a explicar por que no quise hablar. Soy muy respetuoso de todos, como degusta que me respeten a mí. Me llamaron de AJN antes del miércoles que se iba a hacer la presentación en Avodá y no me podía permitir hacer algún tipo de comentario o declaración y que los javerim lo leyeran en Iton Gadol antes que lo hablaran conmigo”.
Hace 4 años le preguntamos si sería candidato para un puesto en la DAIA y nos respondió que no, ahora nos aclara esa respuesta, diciéndonos “Felicito lo que hacen los javerim en DAIA, lo que pasa es que cada uno debe encarar la actividad por dentro de lo que cada uno piensa”.
“Ellos –continuó- hacen una enorme gestión representando políticamente a la comunidad y otros no canalizamos más por la parte comunitaria y no la gestión de representación política. Yo prefiero el trabajo de la comunidad hacía adentro y es relevante el trabajo que hace la DAIA hacía la representación política de la comunidad, y lo valore y aprecio. A mí no me gusta mucho la actividad política, soy una persona de acción, esta es una opinión mía”.
Consultado sobre si la OSA no es una institución política, Junowicz dijo que “no hay diferencias políticas en el campamento sionista, ninguna y el lema va a ser: una sola ideología, sionismo; y un nombre que nos engloba a todos, Israel”.
“Uno no tiene ninguna diferencia ideológica salvo alguna camiseta tatuada en tu cuerpo de la época en que ibas a la tnua (movimiento juvenil). Puede ser que tengamos alguna diferencia en otro ámbito, pero desde acá, ninguna. Son tintes distintos, pequeños tintes. A veces se supone que estamos en lugares distintos y deberíamos sentarnos ambos del mismo lado de la mesa y no enfrentados en la mesa”, añadió.
A lo que agregó que “del mismo lado de la mesa porque son tintes que se producen. No es una actividad política trabajar en la OSA. Para mí es cumplir con lo que establecen los principios del Programa de Jerusalem, trabajar fuerte por nuestra comunidad, por la educación judeo sionista, ayudar a las tnuot, ayudar a la difusión del Estado de Israel, defenderlo, contar por que la existencia del Estado de Israel, contar lo bueno del Estado de Israel, mil cosas que hay que hacer, no política”.
“Conmigo, política olvídate, más te digo, vamos a hacer una OSA inclusiva y no me va a importar de donde va a venirla persona. Va a ser bien recibido siempre y cuando no solamente termine en el `hay que’, o se suma a un proyecto o se trae un ‘hay que’ me explica como y de que manera”, afirmó.
Junowicz aseguró que “la OSA va a ser una institución inclusiva, va a haber apertura a todos los movimientos y a todas las comunidades y va a haber una imagen clara de la institución. Va a ser una institución con gran credibilidad, va a haber respeto, va a ser austera y va a ser confiable”.
“Acá me comprometo, si logró llegar a presidente de la institución, porque como bien dijiste por ahora soy solamente el candidato de un factor y así represento. Veremos lo que deciden los demás factores. Ayer, elegido democráticamente, quizás por error de los javerim de mi factor, me eligieron para ser el candidato”, sostuvo.
– Dice que la OSA va a ser austera. ¿Considera que la OSA no es austera?
– No, bajo ningún concepto. Yo, referente a la gestión anterior quiero agradecer Tololo que han hecho, felicitarles por lo que han hecho, que han trabajado fuertemente por la comunidad y por mantener el vínculo estrecho con Medinat Israel (Estado de Israel), pero evidentemente cada gestión tiene su impronta. Cuando yo hablo de ‘austera’, es que debido a la realidad que se ve hoy en día con las instituciones nacionales judías, la baja de presupuestos y demás, la austeridad es un pilar importante en una institución, y creo que así debe ser”.
– La financiación del último acto de Iom Haatzmaut no fue también un detonante para tu candidatura.
– Yo se que se financió con el aporte de muchas personas que dieron dinero, entre los cuales me incluyo en algo.
– Sabemos muy bien que hubo gente a la que no le gusto ciertos tipos de apoyo, específicamente el de Sergio Spolsky.
– Habría que analizarlo. Realmente no fue ningún detonante en lo mío. Lo mío, te explico, venía surgiendo. Pero sobre el acto de Iom Haatzmaut, dos semanas antes del acto se hablaba si se hacía o no. Yo lo escuche, o tres semanas antes. Estaba en duda si se hacía o no. Yo escuche que quizás el acto no se hacía. Yo escuché a través de interpósitas personas, que se estaba dudando. A mi degusta que las instituciones sean de todos. No fue un detonante de nada, la decisión, en mi cabeza, estaba analizándola y yo lo que quería es una institución fortificada y fortalecida y no que bajo ningún concepto se cierre”.
– Ahora tiene que comenzar las negociaciones con el resto de los factores.
– Cuando se habla del resto de los factores es como decir: vos formas parte de un factor y los demás son otros factores, y personalmente, es cierto, porque algún día cuando era chico fui a una tnua que se llamaba Ijud Habonim. Yo quiero explicar esto de los factores. Yo por un lado soy de Avodá. El resto de los factores son todos del campamento sionista, son todos amigos. Siento una gran amistad y cariño por muchísima gente que está en lo que se llama, entre comillas, otros factores. Nombremos algún otro factor: Mercaz, surge del movimiento conservador y yo estoy afiliado a Dor Jadash, hace años que los servicios de las altas fiestas los hago en un shil conservador. ¿Formo parte de Mercaz o no, soy un referente o no, soy del movimiento conservador o no? Sí, hace años, mis hijos se casaron llevados de la mano por rabinos del movimiento conservador, hicieron los bnei mitzva. Te cuento, estoy invitado para el Tikun Shavuot, la semana que viene, a Beit Hilel; el viernes de la semana que viene tengo una cena en Dor Jadash, en el shil, ¿soy de Mercaz o no soy de Mercaz, soy o no soy del movimiento? Lo que pasa es que nosotros hacemos tal división que en la práctica es inexistente”.
– Pero ahora tiene que lograr que se forme una mesa que sea acorde
– “La mesa se va a formar, si es conmigo, los javerim van a decidir. La mesa va a ser tan amplia como la gente quiera que sea. Va a haber puestos, pero el puesto no da derecho a ahuyentar a personas que de buena fe vengan a trabajar y que por el puesto que no tienen se sientan con menor valor. La OSA si me toca a mí, de vuelta, tener la posibilidad de presidirla y el honor, va a ser una OSA abierta, inclusiva, donde va a haber apertura a toda la comunidad. Nosotros somos voluntarios, la gente tiene que venir y ayudar, y poner el hombro. Y para ayudar y ponerle hombro no alcanza con una mesa donde haya un cargo de presidente, secretario y que eso nos de prerrogativas especiales. Todos van a tener su lugar en la institución. Esta es la única manera, porque ahí podemos realmente pensar en hacer una gestión importante en la institución. Ahora bien, entiendo que lo que vos llamas otros factores necesitan, lo van a tener. Nadie acapara ningún cargo. Otro factor, Likud. Tengo enormes cantidad de amigos en el Likud, y te voy a decir más. Acá hacemos lineamientos que en Israel no existen. El referente de lo que se supone Avodá en Israel es Ehud Barak, y con todo respeto te digo que cuando salieron de la reunión con Obama, atrás de Netanyahu estaba Barak en la foto. Hacemos diferencias en la comunidad que ni siquiera existen en Israel, y yo te digo más, en alguna oportunidad no se si yo hubiera vivido en Israel cual hubiera sido mi voto, tengo mi gran duda cual hubiera sido mi voto. De que diferenciahablamos. Yo me siento tan cercano y con tanto cariño. Tengo muchísimo cariño por muchos compañeros que están en lo que vos llamas otros factores, con algunos tanto o más de lo que sería mi propio factor”.
Finalmente Mendele Junowicz dio una definición sobre como desea ser tratado, y dijo: “la pauta en mi vida es: a mi me gusta tratar al otro como a mí me gustaría que el otro me trate a mí”.
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