Los jueces de la Corte Suprema Elyakim Rubinstein y Edna Arbel rechazaron el miércoles una apelación de un preso musulmán contra la decisión de un tribunal de distrito bajo la cual no se le proveerá pan fresco durante la festividad judía de Pesaj.
Madabe Mahmoud Rayiq está cumpliendo cadena perpetua en un seccional integrado que incluye judíos y musulmanes y pidió poder recibir pan durante Pesaj dado que no hay ninguna ley israelí que imponga el kashrut (régimen alimenticio) en las instalaciones estatales.
Dijo que según la ley judía, un no judío sujeto a una autoridad judía tiene permitido comer jametz (alimentos con levadura y harina) durante Pesaj.
Bajo el dictamen, se dice que el Servicio Penitenciario permite a sus miles de prisioneros, de varias culturas y religiones, observar sus reglas religiosas. No obstante, el pedido de Rayiq sugiere que su deseo de comer jametz durante la festividad es contrario a la situación del resto de los prisioneros e influenciará en su derecho de observar la religión.
En Pesaj y en conmemoración de la salida de Egipto del pueblo judío, no se debe ingerir alimentos que contengan levadura y harina.
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GL