De acuerdo a lo denunciaron por los consumidores británicos, en los supermercados Tescos se vendieron productos etiquetados con la leyenda "West Bank", lo que implica que son producidos por agricultores palestinos, pero que el supermercado reconoció que fueron elaborados por las colonias judías.
La acusación se produce después de que el gobierno británico publicó en diciembre las nuevas directrices para las etiquetas de los alimentos a fin de distinguir entre los bienes de los palestinos y los productos de las colonias israelíes.
Las nuevas directrices fueron dispuestas después de una larga campaña de protesta contra el uso indebido de bienes normalmente etiquetados como procedentes de Israel en lugar de Cisjordania.
"La objeción a la venta y el etiquetado de estos productos no es sólo legalista. La implacable expansión de asentamientos israelíes es reconocido por el gobierno del Reino Unido como un obstáculo para las negociaciones de paz ", argumentaron los consumidores, según informó la agencia FARS.
La presentación fue avalada por la asociación de abogados de derechos humanos palestinos, que ha publicado los motivos para el posible enjuiciamiento de las tiendas de venta de bienes de asentamientos israelíes.
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