Según un descubrimiento hecho por los investigadores de
La planta puede absorber hasta 16 veces más cantidad de agua que el resto de las plantas que crecen en su medio.
El botánico Gidi Neeman aseguró: "Se trata del primer caso a escala mundial de una planta que se auto-irriga canalizando el agua de lluvia hacia las raíces. No conocemos otra que funcione de esta manera".
Neeman agregó que "los resultados demuestran que un proceso de adaptación natural ha resultado en la evolución de la planta para desarrollar grandes hojas, mejorando su habilidad para sobrevivir en el árido clima del desierto".
Las rosetas de una a cuatro hojas del ruibarbo pueden alcanzar un diámetro de un metro, por lo que mejora la recolección de agua durante las escasas lluvias. Este curioso mecanismo de “autoirrigación” permite que la planta tenga reservas extras que le permiten su florecimiento en zonas desérticas.
AF