Inicio NOTICIAS La derecha israelí ahora llama «traidor» a Sharon

La derecha israelí ahora llama «traidor» a Sharon

Por
0 Comentario

Sharon se defendió de sus críticos derechistas y explicó que «mantener a 3,5 millones de personas bajo ocupación es malo tanto para ellos como para nosotros». Y enfatizó: «Quiero dejar en claro que he llegado a la conclusión de que tenemos que llegar a un acuerdo de paz… Esto no puede continuar eternamente», dijo a un grupo de indignados legisladores de su partido Likud que criticaron su decisión.

La mayoría de los israelíes no piensa de la misma manera que los opositores al premier, y según un sondeo difundido ayer por el diario Yedioth Ajronot, el 56 por ciento de los encuestados cree que Israel debería seguir adelante con el plan de paz, aunque la mitad confesó que no cree que su aplicación vaya a conducir a una paz duradera con los palestinos.

Para el ultraderechista ex líder de los colonos Eliakim Haezni, el apoyo de la iniciativa entre los israelíes responde a lo que ocurría durante el Tercer Reich, cuando «los judíos también subían por su voluntad en los trenes y creían todo lo que les decían los alemanes».

En todo Israel hubo protestas de la derecha contra la aprobación del plan de paz, elaborado por el denominado Cuarteto, que busca terminar con el conflicto en la región y crear un Estado palestino independiente en tres años.

El gobierno de Sharon aprobó la medida el domingo apretadamente y con reservas. Una escasa mayoría de 12 de los 23 ministros del gabinete dio el sí al plan, a la vez que presentó una serie de «condiciones» que modifican el programa inicial.

El Consejo de los Colonos Judíos tiene previsto realizar una amplia campaña de protesta en contra de la «Hoja de ruta». Para la semana próxima hay prevista una gran manifestación en Jerusalén, tras la cual los colonos repartirán panfletos casa por casa contra la iniciativa, informó ayer el servicio de noticias y-net.

Desde la ocupación de los territorios palestinos en junio de 1967 se han asentado en ellos más de 205.000 judíos.

El voto a favor del plan marcó un enorme cambio para Israel, especialmente en los sectores menos dados a hacer concesiones, para quienes la idea de un Estado palestino es un anatema. Durante décadas, el mismo Sharon fue el más recalcitrante de ellos. Argumentaba que un Estado palestino representaría un peligro mortal y presionaba a favor de continuar con la expansión de los asentamientos judíos en Cisjordania y Gaza.

El grupo islámico armado Hamas reiteró el domingo que se opone al plan de paz, señalando que el proyecto sólo busca engañar a las milicias para que depongan las armas. Y el movimiento fundamentalista palestino Jihad Islámica denunció que la iniciativa es «un complot angloestadounidense-israelí» cuyo objetivo es poner fin a la Intifada.

Los países árabes y musulmanes se mostraron ayer esperanzados pero al mismo tiempo desconfiados tras la aceptación israelí con reservas de la «Hoja de ruta».

El presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, acogió «con gran satisfacción» la adopción de este plan internacional por el gobierno israelí. «Pero las reservas ponen puntos de interrogación sobre la posibilidad de ponerlo en marcha», indicó en Ramallah.

Por su parte, el secretario general de la Liga Arabe, Amr Musa, estimó que Israel debe traducir en hechos prácticos los compromisos que tomó al aprobar el plan. Fte Clarin

También te puede interesar

Este sitio utiliza cookies para mejorar la experiencia de usuario. Aceptar Ver más