Justamente, el éxodo de los cristianos de la región y la discriminación religiosa se enfrentan los que quedan son las principales cuestiones que se tratarán durante el Sínodo de Obispos de esa región, convocado por el Vaticano y que se celebrará en la Santa Sede del 10 al 24 de octubre.
Monseñor Nikola Eterovic, organizador del Sínodo, dijo que unos 150 obispos, la mayoría de las iglesias de rito oriental, asistirán a la reunión, que sigue a un encuentro que el Vaticano convocó en 2009 de los obispos sobre África, según informó el diario Haaretz en su sitio web.
En esta cumbre religiosa, los obispos discutirán sobre la amenaza de "las corrientes extremistas" del Islam, que tanto preocupa a la iglesia católica de Oriente Medio y se analizará la manera de enfrentarla junto a los musulmanes.
Según el documento preparatorio, “las corrientes extremistas (musulmanas) son una amenaza para todos, cristianos y musulmanes y vamos a tener que enfrentarlas unidos".
El informe, publicado en italiano, inglés, francés y árabe, fue conocido como ‘Lineamenta’ y lleva el título de ‘La Iglesia católica en Oriente Medio: comunión y testimonio’ traza las líneas básicas del debate episcopal.
Consta de una introducción, tres capítulos y una conclusión e incluye un cuestionario general relacionado con los argumentos tratados, cuyas respuestas, 32, deberán ser enviadas a la secretaría general del Sínodo en tres meses por los obispos de la región.
De acuerdo a lo precisado por el Vaticano, la síntesis de las respuestas formará el ‘Instrumentum laboris’ o documento de trabajo del Sínodo, que el Papa Benedicto XVI entregará a los representantes de las Iglesias Orientales Católicas durante su viaje a Chipre del 4 al 6 de junio de este año.
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