Comienza un nuevo año, abramos la posibilidad de detenernos y pensar algunas cuestiones en nuestra rutina cotidiana. En el discurrir diario naturalizamos signos y fenómenos. Todo nos es natural, común y corriente. El Hambre, el frío, la soledad, la discriminación, la violencia…ya nada nos asombra.
Todos ya sabemos lo que no podemos, pero no sabemos lo que sí podemos apoyándonos en el entramado de fuerzas que nos rodean. La innovación está a nuestro alcance.
Parece difícil pero, ¿cómo lograrlo? Abriendo preguntas y procurando ir más allá de lo ya pensado. Cada cuestionamiento y cada pregunta pueden tornarse en condición de apertura, nuevos nacimientos. Depende de cada uno y de los vínculos que forjemos, fundar las condiciones para que el proceso creativo acontezca.
Como dice la poesía de Harav Elimelej Bar Shaúl:
Dos veces nace toda persona
Una – contra su voluntad
La otra – ejerciendo libertad
Una – por manos ajenas
La otra – por decisión propia
Una – acompañada por dolores de parto
La otra – bendecida por dolores de creatividad
Les deseamos a todos la posibilidad de crear muchos inicios nuevos y la construcción de vínculos que faciliten despertar la sensibilidad y el asombro de las pequeñas y grandes preguntas.
Jag sameaj para todos!!!
Shaná tová umetuká!!!
Rectora Escuela Secundaria
Lic.
Las fiestas del mes de Tishrei nos invitan a desnaturalizar nuestro entorno, parar la vorágine habitual y alojar al pensamiento dando un espacio a posibles aperturas e invenciones.
El hombre fue creado inconcluso, para que cada uno sea parte de la creación: construyendo y reconstruyéndose. Cada uno es responsable de sus acciones.