Inicio NOTICIAS “A mí me gustaría ser presidente de la AMIA”
Entrevista a Pablo Reisman, presidente de Avodá de Argentina

“A mí me gustaría ser presidente de la AMIA”
Entrevista a Pablo Reisman, presidente de Avodá de Argentina

Por
0 Comentarios

Pasó más de un año en el que sus miembros designaran a la conducción de Avodá Argentiona, que comenzó con la tarea de reestructuración y hace pocos días sus adherentes eligieron a quienes han de dirigirla por los próximos 12 meses, que asumirán sus cargos el próximo 9 de Septiembre.

Esta conducción la integran Pablo Reisman como presidente; Sergio Borisonik y León Cohen Bello como vicepresidentes; Gustavo Schteimberg secretario; Claudio Apelbaum y Demián Stratievsky prosecretarios; Marcelo Sektzer tesorero; Marcos Neugovsen y Fabián Korovsky  protesoreros; y Bernardo Grinbaum vocal. Por tal motivo AJN, mantuvo una entrevista con el futuro presidente, Pablo Reisman.

Pablo Reisman(64), casado, padre de 3 hijos, es un dirigente con una muy importante actividad institucional, que previo a su actual designación, era secretario de Avodá. Comenzó su actividad como dirigente en la escuela Tel Aviv Nº 3, sita en Helguera y Arregui, hoy escuela Marc Chagal, después de una fusión con Betam de Jonte.

Desde 1974 hasta 1993, se desempeñó en la Secretaría durante 15 años y luego ocupó la presidencia por 3 años en la escuela Tel Aviv; en ese período fue secretario general y vicepresidente de la comisión del Vaad Hajinuj (Concejo Central de Educación Judía) y en varios períodos integró la comisión directiva de Kadima, institución sociodeportiva, de la que desde hace 3 años es su presidente.

Luego de más de 35 años de activismo en Avodá de Argentina, fue designado vocal de la actual Comisión Directiva de AMIA, siendo Secretario del Departamento de Juventud.

Proviene de una familia humilde, su padre nació en Moisés Ville, era un obrero que luego tuvo su propia imprenta, de ideas socialistas y que no deseaba que su hijo trabajara en la imprenta, debido a lo que fue empleado en una compañía de seguros, ramo en el que continúa como broker de seguros, junto a sus 3 hijos.

Sin haber recibido una educación judía formal, sólo estudió hebreo 4 años en el Majón Ben Tzvi, a lo largo de estos años de activismo se destacó por su dedicación en cada una de las responsabilidades que asumió, a la vez que se formó ideológicamente en la corriente sionista socialista, de la cual Avodá es uno de sus máximos exponentes.

Cuando en 1993 dejó la presidencia de la escuela Tel Aviv, pensó tomarse un año de descanso, pero el atentado a la AMIA, donde perdió a muchos amigos, entre los cuales destaca a José Kuki Ginsberg z’l con quien trabajó muchos años en Avodá, “lo golpeó muy de cerca” y se mantuvo alejado, aunque continuó activando dentro de Avodá y de Kadima.

En el 2000 enfrentó un grave problema de salud, lo que lo obligó a suspender su actividad hasta el 2003, año en que volvió a la comisión de Kadima.

Pese a sus 35 años de actividad comunitaria, nunca fue miembro de la Comisión Directiva de la AMIA hasta la presente cadencia, le preguntamos el motivo, a lo que Reisman nos dijo “Siempre creí que los cargos se ganan con el prestigio, el trabajo, la gestión y nunca me propuse para nada, pues consideraba que no era quién para decir ‘quiero tal cosa’, nunca lo hice y cuando en Kadima consideré que estaba preparado para ser el presidente fue cuando me propuse, y en Avodá pasó lo mismo”.

Como el año 5768 (septiembre 2007 – septiembre 2008) fue un año muy duro para Avodá, donde se produjeron las divisiones y los diferendos que en su momento fueron ampliamente informados por AJN/Iton Gadol, le preguntamos cual fue su postura. Su respuesta fue “En esos momentos me puse al lado de Manuel Junowicz, porque creo que es una gran persona, por más que tengamos perfiles diferentes y me sorprendió cuando renunció a la candidatura, pero como siempre fui muy disciplinado en el partido, y debido al pedido de licencia de la conducción me designaron vicepresidente segundo. Acepté en formar parte de la lista con Kaúl, trabajé para la elección, pero como era conciente que existía un clamor para que Kaúl diera un paso al costado se lo pedí, pues consideraba que sino lo hacía nos perjudicaríamos mucho, pero no lo hizo y en las tratativas decidí ingresar como vocal en la Comisión Directiva pues consideré que Avodá no podía estar fuera de AMIA, con sus discrepancias y de hecho soy uno de los directivos que nunca acepté las cosas con las que no estoy de acuerdo”.

Respecto a Avodá afirmó “Creo que pronto vamos a volver a tener un papel destacado en la AMIA. Este año fue muy duro para Avodá, pues quedó muy herido, pues siempre fue gobierno y hoy somos oposición o como se lo quiera llamar, pues compartimos una Comisión Directiva con diferentes perfiles. En mayo el Kinus (congreso) no encontró quien fuera presidente y nos tomamos un tiempo más para ponernos de acuerdo, algunos compañeros me pedían que aceptara presidir el movimiento y acepté el desafío de tomar el riesgo para que Avodá vuelva al lugar en el que debe estar. El mandato es por un año e iremos viendo como se desarrollan las cosas con vistas al futuro”.

Como entre los integrantes de Plural Jai hay varias personas que son miembros de Avodá Argentina, pues no han renunciado, le preguntamos a Pablo Reisman cual es la situación. Respondió: “Es cierto, no renunciaron y tengo una excelente relación con varios de ellos y les digo ahora como presidente de Avodá, que las puertas están abiertas y que todos los que deseen sentarse a la mesa pueden hacerlo. Pero yo pienso por mí, y como me dicen que están dentro del movimiento, tengo que creerles y cuando quieran venir pueden hacerlo, Avodá está abierto para todos, pues todos tienen derecho a expresar sus opiniones. Tengo una muy buena relación con muchos de ellos, con quien nos hemos reunido. Soy una persona muy frontal, que digo las cosas como son y no me gusta decirlas por atrás y creo que este no es un problema de Avodá”.

A un año y medio de las próximas elecciones de la AMIA le preguntamos que están haciendo en ese aspecto, Reisman respondió: “Estamos pergeñando un plan estratégico y en el acto de presentación formal daremos a conocer nuestras propuestas donde explicaremos cual será la matriz de trabajo a partir de ahora en Avodá y cuales serán nuestros 4 puntos centrales: educación judía formal y no formal; pluralismo religioso, porque todos los judíos deben estar dentro de la comunidad teniendo los mismos derechos y las mismas obligaciones; unidad del pueblo judío fomentando la unión de ideas; propender la asociación abierta y apoyo de toda la comunidad a las instancias centrales. Vamos a ver como llegamos al 2011, si iremos solos o en un frente. Considero que Avodá tiene que ser un movimiento horizontal, y el día en que elijamos un candidato lo tiene que elegir el movimiento, igual debe ocurrir con la plataforma, pues se deben terminar los individualismos. A mí me gustaría ser presidente de la AMIA, por algo trabajo en política comunitaria, y cuando uno tiene una ambición sana es buena, pero no puedo ser presidente de la AMIA ni de nada, sino tengo a mis compañeros o a la gente que me apoyan diciendo ‘vos podés ser presidente’ porque no sirve ir contra la corriente. Esto lo manifesté a la comisión de Avodá, que lo aceptó y vamos a trabajar en ese sentido, para ser un movimiento con pensamiento propio pero de todos los integrantes y que nadie se sienta excluido”.

Por último le preguntamos sobre el hecho de que algunos de los miembros que lo acompañan en la conducción de Avodá no tienen experiencia de conducción en movimientos ideológicos, a lo que dijo: “Es consecuencia de la renovación de Avodá. Si nosotros hubiéramos puesto gente con experiencia, hubiera sido la gente de siempre, y no es que esté en contra de esa gente pues tengo amistad con todos ellos, los aprecio, pero creo que una renovación es una renovación y no sirve hablar de renovación cuando volvemos siempre a las mismas personas”.

 

EACh.-MD

 

 

También te puede interesar

Este sitio utiliza cookies para mejorar la experiencia de usuario. Aceptar Ver más