En dialogo con la Agencia Judía de Noticias, AJN, Igal Palmor, principal vocero de la cancillería israelí, expresó que “lo sucedido era esperable” y llama a los países que no se retiraron del recinto durante el discurso de Ahmadinejad a que “reflexionen sobre lo que apoyan y que consideren las consecuencias que ese tipo de declaraciones traen”.
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En medio de la polémica que despertó el discurso del presidente iraní en la Conferencia contra el Racismo denominada Durban II, Igal Palmor, principal vocero de la cancillería israelí, expresó que “lo sucedido en Durban es lo que sabíamos que iba a pasar. No es una conferencia contra el racismo, sino una plataforma para expresiones del antisemitismo”.
Consultado acerca de la decisión de Argentina de no retirarse del foro en el que el presidente iraní daba el discurso, Palmor respondió: “pido un examen de conciencia para los países que se quedaron, y que piensen en las ideas que han aplaudido hoy. Además, pido que consideren las consecuencias que este pensamiento puede traer a nivel internacional y dentro de cada nación”.
“Es un circo que se ha generado, principalmente por las declaraciones del presidente Ahmadinejad”.
Palmor reflexionó que: “estoy decepcionado de los países que no protestaron contra el discurso, que se quedaron sentados aplaudiendo. Tengo una sensación de completo extrañamiento”.
Por último, expresó que, antes de avalar este tipo de conducta y complacencia con el fanatismo, se debe pensar, claramente, en las graves consecuencias que semejantes ideas pueden traer aparejadas.
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