En el mes de julio, Hezbollah le entregó a Israel un informe secreto sobre el destino de Ron Arad como parte del intercambio de prisioneros en el que Israel liberó a cinco prisioneros y obtuvo a cambio los restos de los soldados Ehud Goldwasser y Mark Regev, quienes habían sido capturados hacía dos años.
El acuerdo se llevó a cabo a pesar de que Israel, que presume que Arad está vivo, calificó al informe de Hezbollah como “absolutamente insatisfactorio”.
Arad fue secuestrado por milicianos chiítas luego de lanzarse de su nave averiada sobre el Líbano.
Según citó Maariv, el informe de Hezbollah dice que Arad estuvo primero detenido en Beirut y luego trasladado a la localidad de Nabi Cheit.
“El piloto israelí escapó de su celda durante la noche entre el 4 y 5 de mayo de 1988 y se encaminó hacia el sur, donde entonces se encontraba la zona de seguridad ocupada (por Israel)”, decía el informe de Hezbollah citado por Maariv.
Asimismo, el documento decía: “Se encontraba en un área remota, montañosa y árida a la que las personas raramente accedían. Es posible que haya colapsado y, debido a factores naturales, no haya podido seguir, o que se haya lastimado, sufrido fracturas, hemorragias, fiebre, envenenamiento, sed, que haya caído de un acantilado, o que incluso haya sido víctima de un animal predador o que haya caminado sobre un campo de minas”.
Maariv agregó que el informe de la organización libanesa rechazó las acusaciones de Israel de que Hezbollah o Irán, principal aliado del grupo terrorista, mantienen cautivo a Arad.
En tanto, Hezbollah se negó a emitir comentarios sobre el informe sobre el piloto israelí.
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