Un estudio realizado por el Ministerio de Bienestar israelí consignó que 10 mil niños se encuentran en riesgo de sufrir abusos de parte de sus padres.
Además, en 2007 se registró un aumento del 18 por ciento en las intervenciones de trabajadores sociales para proteger a los menores de la agresión de su familia en las disputas por divorcio.
El documento también resaltó que de aquellos niños considerados en riesgo, una minoría fue hospitalizada luego de intentos de suicidios o de sufrir anorexias u otros desordenes psicológicos.
De acuerdo a las cifras de la Oficina Central de Estadísticas, en 2007 se divorciaron 11 mil parejas y los consejeros legales de los servicios de bienestar escribieron 10 mil reportes para ayudar a los jueces a decidir sobre la custodia de los niños, publicó el diario Haaretz.
El jefe de los consejeros de Bienestar, Ronit Tzur, aseguró que lo más recomendable es siempre la custodia compartida y que durante 2007 los trabajadores sociales lograron reunir a más de 3 mil niños con sus padres.
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