La Autoridad Palestina (AP) instó a todos los palestinos que viven en el exterior a regresar a Israel para la celebración del 60 aniversario del Estado.
Según un plan preparado por Ziad Abu Ein, oficial del partido oficial Al Fatah y viceministro de Asuntos Penitenciarios de la AP, los palestinos decidieron implementar la Resolución 194 de las Naciones Unidas relativa a los refugiados.
El artículo de la norma, que fue aprobada en diciembre de 1948, establece que “debe permitirse que los refugiados que deseen regresar a sus hogares y vivir en paz con sus vecinos, así lo hagan lo antes posible”.
Ésta es la primera iniciativa de este tipo, y tiene como fin “empañar las celebraciones” del aniversario de Israel, informó este martes el diario The Jerusalem Post.
El plan, titulado “Iniciativa de retorno y coexistencia”, sugiere que la AP abandonó la idea de dos estados para dos pueblos como solución al conflicto israelí-palestino por la de un único estado en el que árabes y judíos vivan juntos.
“Los palestinos, respaldados por todos aquellos que creen en la paz, la coexistencia, los derechos humanos y las resoluciones de la ONU, reunirán todas sus energías y esfuerzos para regresar a su tierra natal y vivir con los judíos en paz y seguridad”, dice el documento.
La iniciativa de Abu Ein pidió que los refugiados regresen a Israel el 14 de mayo con sus equipajes y carpas para establecerse en sus pueblos de origen, y que lleven banderas de la ONU y las credenciales de identificación que emite la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA según sus siglas en inglés).
También se instó a los israelíes recibir a los palestinos “que regresarán para vivir junto con ellos en la tierra de la paz”, y pidió que los países árabes, especialmente Jordania, Siria, Líbano e Irak, abran sus fronteras y presten apoyo logístico para facilitar el retorno de los refugiados a Israel.
El documento destacó que los palestinos no pueden esperar a que se reconozca su “derecho de retorno” en las negociaciones con los israelíes.
“Debemos tomar el asunto en nuestras propias manos. Ni las negociaciones, ni los slogans, ni las resoluciones de la ONU nos van a devolver nuestros derechos”, concluyó.
El proceso de paz en Medio Oriente parece cada vez más difícil de concretarse.
En los últimos días, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, anunció seguirán las construcciones en un barrio de Jerusalem Este, en lo que significa un desafío a las críticas internacionales expresadas contra la expansión de asentamientos en la zona.
Olmert dijo que Har Homa, un barrio ubicado en el área de Jerusalem que los palestinos reclaman como capital, es “una parte inseparable”.
“Todos saben que no hay posibilidades de que el Estado de Israel renuncie a un barrio como Har Homa. Es una parte inseparable de Jerusalem”, señaló.
Si bien Olmert prometió que no se construirán nuevos asentamientos, sostuvo que Israel espera mantener el control de los barrios judíos de Jerusalem Este y los principales asentamientos en Cisjordania, como parte de un acuerdo de paz definitivo.
En respuesta a las declaraciones de Olmert, el jefe de negociaciones palestino, Ahmed Qureia, dijo: “Rechazamos completamente las construcciones”, y que no aceptarán “ni un ladrillo más en ningún asentamiento israelí en Cisjordania y Jerusalem Este”.
En este contexto, los equipos de negociadores israelíes y palestinos se preparan para retomar las conversaciones, tal como hicieron el viernes pasado, anunció la canciller Tzipi Livni.
PB-GT
249