El líder cristiano Michel Aoun, portavoz de la oposición encabezada por Hizbulá, advirtió de que este grupo chií podría recurrir a las armas si es puesto ‘entre la espada y la pared’ por la situación política que atraviesa el Líbano.
‘Hizbulá siempre ha rechazado utilizar sus armas en el interior (del país), pero si es agredido y puesto entre la espada y la pared podrá emplear su arsenal para defenderse’, dijo Aoun en una entrevista retransmitida anoche por la cadena de televisión libanesa LBC y recogida hoy por la prensa nacional.
Hizbulá es la única milicia libanesa que no fue desarmada tras la guerra civil (1975-1990) por ser considerada un grupo de resistencia contra la ocupación israelí del sur del país.
Sin embargo, en la actualidad varias formaciones políticas exigen que sea el Estado la única entidad capaz de decidir sobre los asuntos relacionados con la defensa nacional.
Aoun insistió, asimismo, en que ‘Hizbulá tiene el derecho de vengar el asesinato de Imad Mugnie’, el jefe militar de este grupo muerto recientemente en un atentado con coche bomba en Damasco, que Hizbulá atribuye a Israel.
La mayoría parlamentaria libanesa, representada principalmente por grupos suníes con el apoyo de cristianos y drusos, mantiene un pulso por el poder con la oposición, de mayoría chií, que ha conducido al país en una larga crisis política.
El parlamento no se reúne desde diciembre de 2006 y el país vive sin presidente desde el pasado noviembre debido a los desacuerdos entre los grupos políticos.