El primer ministro israelí, Ehud Olmert, aseguró hoy que su país hará ‘pagar un alto precio a los terroristas’, ante la reciente escalada de violencia en el sur de Israel y la Franja de Gaza.
Ayer fallecieron al menos trece palestinos, entre ellos un bebé, y un civil israelí en varios ataques a ambos lados de la frontera.
En declaraciones a los periodistas en Tokio, Olmert señaló hoy que ‘no pararemos nuestra batalla’ y que se trata de ‘un proceso doloroso’.
‘Haremos que los terroristas paguen un alto precio’, apuntó el primer ministro israelí, que hoy concluye una visita de cuatro días a Tokio durante la que se ha entrevistado, esta misma mañana, con la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, también de viaje oficial en Japón.
Tras ese encuentro, Rice reclamó el fin de los ataques con cohetes de la milicia palestina de Hamás sobre Israel, al tiempo que expresó su preocupación por la situación humanitaria en el territorio palestino.
‘Estoy preocupada por las condiciones humanitarias allí y las personas de Gaza que se están viendo afectadas’, señaló Rice.
En declaraciones a la prensa estadounidense que la acompaña en su viaje a Japón, la jefa de la diplomacia norteamericana declaró que ‘los ataques con cohetes tienen que acabar’.
Un israelí de 47 años murió ayer como consecuencia de uno de los cohetes lanzados por Hamas desde Gaza y en las consiguientes represalias militares de Israel fallecieron trece palestinos, entre ellos cuatro niños.
La última represalia israelí fue contra la sede del Ministerio del Interior, el organismo desde el que Hamás dirige a los cuerpos de seguridad en Gaza, la Fuerza Ejecutiva, creada por los islamistas en 2006.