El rabino Alejandro Avruj expresó hoy su “dolor” por la muerte de su colega y “gran amigo” Ariel Korob, de quien fue compañero durante su formación en el Seminario Rabínico y en la Fundación Judaica. Avruj, en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN), destacó la pasión por el estudio, la enseñanza y la familia que tenía Korob, quien falleció el domingo en un accidente de tránsito. “Fue un gran maestro de la tradición, un ferviente amante de la enseñanza, un apasionado de la familia y de (el club) Atlanta, y dueño de una sonrisa y una oratoria que lo decían todo”, expresó Avruj. El rabino se comprometió a perpetuar la vida de Korob: “Desde la Fundación Judaica daremos continuidad a su vida en la nuestra, a través de nuestras manos y nuestro corazón, y daremos vida eterna a nuestra obra, que es la suya”, señaló. Avruj afirmó que todos en la Fundación sienten la pérdida del “compañero, colega, trabajador, maestro, rabino y amigo”, y recordó su idea de que “las pequeñas cosas hacen a las grandes pasiones y la belleza de la vida”. Al respecto dijo que significó un placer ser compañero de Korob y lo consideró un “valiente” de su generación por publicar desde 2006 la revista académica “Sambation”, sobre estudios judíos desde América Latina. Por último, remarcó que el velatorio se realiza en el Gran Templo de Paso como “el de los justos o los hombres importantes” de la comunidad, tal fue el caso de Korob.
La muerte del rabino Ariel Korob, ocurrida el domingo en un accidente de tránsito en la provincia argentina de La Pampa, causó pesar en la comunidad judía. El Seminario Rabínico Latinoamericano, donde se había ordenado como rabino en 2000, la Asociación ORT, las instituciones agrupadas en la red de Fundación Judaica, el Comité Judío Americano, Hebraica, la Comunidad Bet Hilel y hasta la ex candidata presidencial Elisa Carrió expresaron sus condolencias a la familia en avisos publicados en matutinos de Buenos Aires. Korob, que participaba de la Mesa Interreligiosa, tenía 37 años y falleció cuando el auto que manejaba se cruzó de carril en una ruta pampeana e impactó contra un camión que circulaba en dirección contraria. En el hecho también sufrieron heridas su esposa Irene Wolkostawski y sus tres hijos: Lautaro, de 6 años; Meirav, de 4; y Mahana, de 2. Su cuerpo era velado esta mañana en el Gran Templo de la calle Paso, ubicado en el barrio de Balvanera y donde estuvo al frente de la sinagoga. Mañana será enterrado en el cementerio comunitario de La Tablada, confirmaron algunos allegados. En tanto, sus hijos Lautaro y Mahana están fuera de peligro y llegaron anoche a Buenos Aires. Su esposa, sin embargo, permanece en estado grave y será trasladada en las próximas horas en un avión sanitario a la capital argentina para continuar su internación. Meirav, por último, permanece alojada en el hospital de General Pico y, según dijeron los médicos que la atienden, su situación es delicada debido a las heridas que presenta en los pulmones. Korob formaba parte de la Fundación Judaica junto al rabino Sergio Bergman, con quien en el último tiempo promovió que los judíos conversos pudieran ser enterrados en La Tablada, una decisión que la AMIA tomó el viernes pasado. En declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN), el rabino Alejandro Avruj, también compañero de Korob en la Fundación Judaica, lamentó “con enorme dolor” la pérdida y se comprometió a “dar continuidad” a la vida de su compañero a través de su obra, “con las manos y el corazón”. El accidente protagonizado por Korob ocurrió en la ruta nacional 188, a la altura de la localidad de Adolfo Van Praet. El rabino viajaba junto a su familia hacia el centro turístico de Las Leñas, en Mendoza. Su cuerpo fue trasladado ayer a Buenos Aires en un avión facilitado por el Ministerio del Interior. Korob era licenciado en Comunicación, de la Universidad de Buenos Aires (UBA), egresado del Programa Jewish Educators del Centro Melton de la Universidad Hebrea de Jerusalem y docente del Seminario Rabínico en las áreas de Biblia y Ley Judía. ND-GT
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