Egipto anunció este sábado que seguirá dejando a los palestinos de Gaza atravesar su frontera para aprovisionarse en su territorio por cuarto día consecutivo, en respuesta al bloqueo israelí.
Palestinos subiendo por escaleras para cruzar |
‘Los palestinos continuarán pasando hasta que hayan satisfecho todas sus necesidades en diversos productos y alimentos’, afirmó el gobernador del norte del Sinaí, Ahmed Abdel Hamid, la provincia fronteriza de la Franja de Gaza, citado por la agencia oficial Mena.
Las fuerzas de seguridad egipcias recibieron la orden ‘de facilitar el paso de los palestinos y de conducirlos a los lugares donde podrán encontrar lo que necesitan’, añadió.
Por primera vez desde que varios tramos de la frontera fueron derribados, centenares de vehículos entraron este sábado en el lado egipcio de Rafah, completamente congestionada.
Activistas del movimiento islamista Hamas, en el poder en Gaza, perforaron desde la noche del martes varias brechas en el muro que separa ambos territorios, permitiendo a los palestinos salir al exterior en busca de alimentos y gasolina, cada vez más escasos en la Franja.
Miembros de las fuerzas del orden egipcias estaban presentes en la frontera para vigilar la circulación sin intervenir, comprobaron periodistas de AFP.
Hombres armados de Hamas presentes también verificaban los maleteros de algunos vehículos para asegurarse que no transportaban armas a la Franja de Gaza.
Las fuerzas egipcias establecieron no obstante retenes en las salidas egipcias de Rafah para impedir a los vehículos palestinos adentrarse aún más en la península del Sinaí, pero dejaban a la gente viajar en taxis o en vehículos particulares hasta la ciudad de El Arich, situada a unos 50 kilómetros.
Israel decretó un boicot el pasado día 17 en represalia por los disparos de cohetes palestinos contra su territorio.
Las fuerzas de seguridad egipcias habían tratado el viernes de retomar el control de la frontera, cerrando parcialmente los accesos, pero los activistas volvieron a abrir nuevas grietas con la ayuda de excavadoras.
Según cifras de la ONU, al menos 700.000 palestinos, es decir, casi la mitad de la población estimada de la Franja de Gaza, cruzaron la frontera desde el pasado miércoles.
En la parte egipcia de la ciudad fronteriza de Rafah, hubo un intercambio de disparos en una estación de servicio donde las reservas de carburante empezaban a escasear.
Ante el caos y la avalancha de palestinos, el propietario se había negado a vender mientras las fuerzas de seguridad egipcias no garantizaran la seguridad de su establecimiento.
Un grupo de egipcios aprovechó la apertura de la frontera para hacer el viaje inverso, hacia Gaza, por primera vez en muchos años, no sin provocar la estupefacción de los habitantes.
‘He venido a hacer un poco de comercio. Es la primera vez en mi vida que veo Gaza’, afirmó a AFP Rabi Zuhrub, de 25 años, quien llegó en coche junto a seis amigos.
Otro egipcio, Fayiz, un agricultor de 47 años, reconoció su curiosidad: ‘Quería ver cómo es la franja de Gaza’, dijo.
El paso fronterizo de Rafah, entre los territorios palestino y egipcio, había permanecido cerrado en forma casi permanente desde junio de 2006.