La franja de Gaza, aislada totalmente por Israel en represalia por los disparos de cohetes palestinos, sufría el domingo importantes cortes de luz después de que la única central eléctrica del territorio cesase su actividad por falta de combustible.
Pese a los llamamientos internacionales, el gobierno israelí decidió este domingo mantener el bloqueo total decretado cuatro días antes, el jueves. Desde esa fecha, Israel no suministra carburante, alimentos y otros productos de primera necesidad a este territorio, donde se hacinan 1,5 millones de habitantes que dependen por completo de la ayuda exterior.
El presidente palestino, Mahmud Abas, que perdió la autoridad sobre Gaza en junio, cuando los islamistas de Hamas se hicieron con la misma, exigió el levantamiento inmediato del bloqueo y amenazó con recurrir al Consejo de Seguridad de la ONU, según su portavoz, Nabil Abu Rudeina. Abas "pidió al gobierno israelí que levante inmediatamente" las medidas contra Gaza y "permita la entrada de carburantes para facilitar la vida de los inocentes", explicó Rudeina.