Un gesto del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, le dio nuevo impulso a la versión sobre un inminente regreso de Luis D’Elía al Gobierno. En medio de rumores y después de que, en los últimos días, el funcionario y el ex piquetero se elogiaran mutuamente, Fernández evitó rechazar la posible reincorporación del líder de la Federación Tierra y Vivienda (FTV). Más aún, insistió en que en una reunión que mantuvieron recientemente analizaron cómo retomar un programa que estaba a su cargo en la Subsecretaría de Tierras para el Hábitat Social.
«Estamos preocupados porque hay miles de personas que ocupan tierras desde hace décadas y no tienen regularizada su situación», comentó el jefe de Gabinete en declaraciones radiales. Por eso, dijo, se reunió con el ex piquetero para ver cómo «poner nuevamente en marcha el plan» Arraigo, de entrega de escrituras a personas que por años ocupan terrenos sin documentos de propiedad.
El ministro destacó que D’Elía «siempre acompañó» la gestión del ex presidente Néstor Kirchner. Y hasta justificó los enojos del ex piquetero, que en algún momento dijo del propio Fernández que era parte de «lo peor de la derecha reaccionaria, entreguista y cipaya».
Como adelantó Clarín, el líder de la FTV y el jefe de Gabinete se reunieron en la Casa Rosada a fines de diciembre. Según el ex piquetero, fue en el marco de conversaciones que mantiene para volver a las filas kirchneristas después de que lo obligaran a renunciar en noviembre de 2006, cuando se supo que había acordado con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, el apoyo a Irán en la causa AMIA.
La posible incorporación de D’Elía al gabinete de Cristina Kirchner fue cuestionada desde la comunidad judía, enfrentada al ex líder piquetero.
«Para ser funcionario se deben reconocer y respetar las instituciones», dijo el titular de la DAIA, Aldo Donzis, a la Agencia Judía de Noticias. «D’Elía -agregó- se manifiesta permanentemente contra la Justicia argentina» por las acusaciones contra Irán en la causa AMIA.
«Si hay algo que debemos reconocer -expresó, en tanto, Edgardo Gorenberg, secretario general de la AMIA- es que cada día nos depara una sorpresa que no hubiéramos imaginado el día anterior». Y añadió: «Quizás a alguien le sea útil esta designación, pero seguramente no le será útil al prestigio de nuestro país».