«En la franja de Gaza hay una guerra entre las Fuerzas Armadas de Israel y las organizaciones terroristas», ha afirmado el jefe del Gobierno al comenzar la reunión, según han dicho fuentes del Gabinete.
Haniya formuló el ofrecimiento por medio de la Agencia Palestina de Noticias Maan, con sede en la ciudad cisjordana de Belén, y a principios de esta semana hizo lo mismo mediante declaraciones al corresponsal palestino del Canal 2 de la televisión israelí, Suleimán a-Shafi.
Las operaciones contra las milicias palestinas, agregó Olmert, «continuarán para reducir al mínimo sus ataques con cohetes» Al Kasam contra localidades vecinas de Gaza en el sur de Israel. Con todo, señaló Olmert, hará el máximo esfuerzo para que esas operaciones, que incluyen sanciones de carácter económico, como la reducción en el abastecimiento de combustibles, no afecten a la población civil que no participa en esos ataques.
Israel, comentó, no está interesado en negociar con organizaciones que rechazan los principios básicos de la «Hoja de ruta» establecidos por el Cuarteto de Madrid, formado por Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y la ONU, que exigen poner fin a la violencia y reconocer al Estado israelí.
Al menos cuatro ministros del Gabinete Nacional, entre estos Benjamín Ben Eliezer de Infraestructuras; Ami Ayalón, sin cartera y ex jefe del Servicio de Seguridad (Shin Bet), y Guideón Ezra, a cargo de Asuntos del Medio Ambiente, apoyan la posibilidad de negociar con los islamistas de Hamas si cumple, entre otras condiciones, la de deponer las armas y reconocer a Israel.
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