El 77,2 por ciento de la población es judía y el 19 por ciento es árabe, lo que significa un retroceso del 0,4 por ciento de la población judía con respecto al conjunto de la población, según el informe publicado en vísperas del Rosh Hashanah, el nuevo año judío que se celebrará el sábado.
El número de habitantes ha aumentado en 133.000 personas durante el año. Los judíos asjenazes (originarios de Europa) representan el 41 por ciento de la población judía frente al 16 por ciento de los judíos sefarditas (orginarios de los países árabes). El margen se explica por la fuerte inmigración de judíos de Rusia, que cuenta con 1.150.000 personas, de las cuales el 70 por ciento ha llegado a Israel desde
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