Sharon, de 78 años, fue trasladado el pasado domingo de Jerusalén a un centro especializado en cuidados médicos a largo plazo en Tel Aviv. Según la información publicada, varios familiares del ex primer
ministro declararon que Sharon abrió los ojos entre una y tres horas. Aparentemente, no movía los ojos ni recuperó la conciencia. Una portavoz del centro médico Sheba, donde se encuentra actualmente el pacientes, se negó a confirmar o desmentir la información.
Varios expertos han señalado que los pacientes en estado de coma abren los ojos con frecuencia, lo que no indica que haya ningún nivel de conciencia.
Los medios israelíes han publicado que el centro médico Sheba tratará de retirar a Sharon el respirador y harán otros esfuerzos para tratar de mejorar su condición.