Itongadol/Agencia AJN.- En una emotiva ceremonia el domingo por la noche, una pareja ultraortodoxa celebró su boda en un patio fuera de la sala de coronavirus del hospital Hadassah Ein Kerem en Jerusalem para permitir que el padre del novio, que se encuentra internado allí, pudiera participar.
El padre del novio ha estado hospitalizado en la sala de coronavirus de Hadassah desde finales de septiembre y sigue en estado grave, con importantes dificultades respiratorias. Por lo tanto, la familia se dirigió a la organización Yad Avraham, que a menudo actúa como mediadora entre las autoridades del hospital y las familias, con una petición especial: hacer arreglos para que la joven pareja se case bajo la ventana del hospital del padre.
Shimon Braun y su hijo Hezki, que dirigen Yad Avraham, se dirigieron en consecuencia a las autoridades del centro médico, que inmediatamente expresaron su voluntad de hacer lo que pudieran, a pesar de los desafíos inherentes al esfuerzo. Noa Regans, enfermera jefe en el pabellón 5C de Coronavirus, relató: «Esta petición tocó todos nuestros corazones. Todo lo que querían era que su padre, un paciente de 56 años con coronavirus, pudiera participar de alguna manera en este evento tan emotivo».
«A la familia se le dijo que según las directrices del gobierno, habría una restricción en el número de personas a las que se les permitiría estar presentes, y que tendrían que llevar mascarillas – e inmediatamente aceptaron los recaudos y se adhirieron a ellas durante toda la ceremonia», señaló Regans.
La ventana del hospital desde la que veía la ceremonia el padre del novio.
«Yad Avraham y nuestro personal trabajaron duro para que la boda se llevara a cabo y, esta tarde, todos lloramos cuando el novio saludó a su padre con tanta emoción desde el patio de abajo. El padre estaba mirando desde su cama de hospital con el personal del hospital a su lado, así como los voluntarios de Yad Avraham. Podía oír todas las bendiciones de la boda y nos invadió la emoción cuando toda la familia gritó sus bendiciones y deseos para su recuperación por el micrófono», añadió.
Por su parte, el profesor Zeev Rothstein, director del centro médico, dijo: «Sólo en Hadassah podía tener lugar un evento tan emotivo. Hicimos posible que el padre de familia viera e incluso participara en la boda de su hijo, a pesar de que está gravemente enfermo, y fue un evento que nadie olvidará, un ejemplo excepcional de la dedicación del personal de Hadassah».