Itongadol/AJN.- A raíz del aumento de casos de coronavirus, funcionarios del Ministerio de Salud estimaron esta mañana que no habrá otra opción que programar un cierre generalizado de la economía a inicios del mes de setiembre. Esto con el objetivo de evitar un rebrote en las fiestas de Tishrei.
Los ministros de conforman el Gabinete de coronavirus trabajan para evitar un cierre y buscan soluciones alternativas. Por el momento, el pase sanitario del Ministerio de Salud no brinda protección completa ya que los menores de 12 años no están incluidos en este sistema, al igual que las sinagogas en las que asisten decenas de personas.
Además, no hay un operativo policial para garantizar el cumplimiento de las normativas sanitarias. También está el hecho de que un millón de ciudadanos que podrían vacunarse y no lo hicieron y desoyen los pedidos de las autoridades.
La directora de Servicios de Salud Pública de Israel, Sharon Alroy Preis, expresó: “No creo que el pase sanitario y otras medidas restrictivas nos conduzcan a que la tasa reproductiva de la enfermedad baje a menos del uno, sí nos puede ayudar a ralentizar la morbilidad y a incrementar la inmunización”.
El informe epidemiológico del Ministerio de Salud de Israel de esta mañana señaló que hay 360 personas internadas de gravedad por el coronavirus. En las últimas 24 horas se detectaron 3.372, sobre un total de 87,915 tests, lo que dio una tasa de positividad del 3.87%.
Actualmente hay en Israel 31.393 personas cursando la enfermedad. La campaña de vacunación sigue su curso y 5.8 millones de aplicaron la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus, 5.3 millones las dos y 496,220 ya se dieron la tercera inyección.
Ayer el primer ministro de Israel, Naftali Bennet, aprobó el formato para la apertura del año escolar el próximo mes de setiembre que había sido presentado por la titula de Educación, Shasha Bitton. Dos días antes del inicio de clases se realizarán tests por Covid-19 a 1.9 millones de alumnos en Israel.
Además, en las denominadas “ciudades naranjas” y “rojas” se aplicará el programa “Escudo Educativo”, por el que se testeará a todos los alumnos y personal educativo una vez a la semana con el objetivo de reducir los contagios en los establecimientos.